En conversatorio con los integrantes de las Agrupaciones de Seguridad Unidas por México (ASUME), el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Cervantes Díaz les expresó todo el apoyo del organismo que dirige para que se conviertan en la Cámara Nacional de la Industria de la Seguridad Privada, así como también su impulso para que en este periodo ordinario de sesiones se logre aprobar en el Congreso de la Unión la Ley General de Seguridad Privada.
“El tema de la seguridad es parte de la agenda critica del Consejo Coordinador Empresarial. Para nosotros esto es muy importante y por eso estamos apoyando que esto se pueda lograr a la brevedad. Cuentan con todo el apoyo y es también de nuestro interés para poder integrar todo lo que sea seguridad, todo lo tenemos que reforzar, no solo con los tres niveles de gobierno, sino también con la seguridad privada”, expresó el dirigente de los empresarios nacionales.
“Como Consejo Coordinador Empresarial tienen todo el apoyo desde ahora mismo, porque tenemos que dignificar todo. Y quién mejor que ustedes que capacitan, que cuiden, que hacen los exámenes de confianza, porque cuando uno ve una empresa de seguridad, no sabe todo lo que hay detrás de esa empresa para poder tener cuerpos de calidad”, expresó el máximo dirigente empresarial.
De la misma forma, expresó su apoyo a la aprobación de la Ley General de Seguridad Privada, la cual se debe empujar, porque va a ayudar enormemente y va a ser un complemento de la seguridad pública, principalmente en las empresas.
“Estamos de acuerdo en toda medida que brinde certeza y solidez al Estado de Derecho”, apuntó para agregar que “una Ley General de Seguridad Privada es positiva para uniformar criterios a nivel nacional y de calidad para las empresas que brindan este servicio tan delicado”.
Armando Zúñiga Salinas, presidente de ASUME, organismo que agrupa a las 32 asociaciones de seguridad privada más importantes del país, expresó que 80 por ciento de las empresas del país son usuarias de estos servicios especializados, en el que invierten entre 5% y el 8% de su gasto operativo, lo cual ha llevado a esta industria a un acelerado crecimiento que hoy con 800 mil empleos significa el 2% del Producto Interno Bruto (PIB) a través de sus distintos sectores como alarmas, blindajes, profesionales de seguridad, directivos de la seguridad corporativa, tecnología, rastreo y otros.
El dirigente de las empresas de seguridad privada en el país agregó que las Agrupaciones de Seguridad Unidas por México están listas para crear los cimientos que permitan constituir la Cámara de la Industria de la Seguridad Privada, porque desde dicha plataforma podrán avanzar con mayor celeridad y solidez para enfrentar varios retos que actualmente están pendiente.
“Algunos de estos retos es la formalización de casi el 40% de las empresas que hoy ofrecen servicios, avanzar en la profesionalización, regionalización y cobertura, así como exigir un mejor marco legal que nos permita darle mayor impulso y certeza jurídica al crecimiento de esta industria”, destacó.
Zúñiga Salinas añadió que la Ley General de Seguridad Privada tiene tres aspectos esenciales para la industria como la homologación de un permiso único con el objetivo de crear un Registro Nacional de las empresas que prestan el servicio, ya sea en uno o en varios estados; establecer claramente la distribución de competencias en la materia que tendrán la Federación, los Estados y los municipios y; la aplicación de diferentes niveles de sanciones tanto para las empresas como para los usuarios que contraten empresas que no cuenten con las autorizaciones correspondientes.
Finalmente, dijo que ha llegado el momento de hacer evidente que la seguridad privada es un pilar muy relevante para la competitividad y el crecimiento nacional, al convertirse en un sector estratégico que ayuda a dar certidumbre y a proteger las inversiones, contribuyendo así a la paz de nuestro país.