Por Teófilo Benítez Granados, Rector del Centro de Estudios Superiores en Ciencias Jurídicas y Criminológicas (CESCIJUC)
Las mejores herramientas para acercarnos al futuro del trabajo son la automatización y la Inteligencia Artificial generativa, que podría automatizar el 10 por ciento las tareas en la economía estadounidense, sobre todo en quienes ganan el equivalente a menos de 53,000 pesos anuales en Estados Unidos.
En ese rango salarial existen 14 veces más probabilidades de perder el trabajo o ejercer otra ocupación respecto a aquellos con salarios más altos, aunque también afecta a los puestos de trabajo en el extremo superior del rango salarial.
Los escritores, creativos, abogados, consultores, todos van a necesitar trabajar de manera diferente, porque partes de sus trabajos se verán afectados por la IA genérica.
Es probable que doce millones de transiciones ocupacionales tengan que ocurrir de aquí a 2030, con el 80 por ciento de ellas en servicio al cliente, servicio de alimentos, producción y soporte de oficina.
Las asociaciones público-privadas entre el gobierno federal y las instituciones educativas podrían ayudar a capacitar y desarrollar las habilidades de nuestra fuerza laboral.
A medida que los empleadores cambien a una contratación más basada en habilidades que en credenciales, tendremos más empleos en el futuro que en la actualidad, dadas las tendencias demográficas, de consumo y el crecimiento del PIB. En promedio, habrá trabajos mejor pagados, pero requerirán niveles más altos de educación.
La forma en que nos aseguramos de apoyar esta necesidad es centrarnos en el reciclaje y la mejora de las competencias.
El reskilling, también llamado reaprendizaje o reciclaje laboral, es una técnica que consiste en hacer que la plantilla de una empresa determinada adquiera nuevas competencias y habilidades. De esta manera, los empleados podrán desempeñar de forma más satisfactoria una nueva profesión o una actualización de la ya ejercida.
Asimismo, ls empresas realmente pueden pensar en oportunidades para contratar desde adentro en lugar de externamente para un puesto vacante.
A medida que miramos a lo largo del tiempo, alrededor del 9 o 10 por ciento de los empleos de cada década son nuevas ocupaciones netas que no existían antes. Eso podría ser en analítica avanzada, energía renovable o un influencer de las redes sociales.
En los últimos tres años, hemos visto 50 por ciento más de transiciones ocupacionales que en los tres años anteriores. Estas dan como resultado que los trabajadores cambien a puestos con salarios más altos.
En si, hay muchos cambios ocupacionales por los que tendremos que hacer la transición, mucha mejora de habilidades y reciclaje a escala. Pero también habrá más empleos con salarios más altos.